¿jugamos a ser rastreros?

No fui yo la primera en mover ficha. Yo no tenía los movimientos pensados. No sabía siquiera a que clase de juego estábamos jugando. Simplemente me dejé arrastrar por ti, por este juego de niños.
Al principio todo iba bien, era la linda muñequita de porcelana, frágil. Había que tener cuidado con ella porque el mínimo rasguño era peligroso para su integridad.
Pero el tiempo ayuda a las heridas a cicatrizar, y cada vez me volvía más fuerte. Más capaz de comerme el mundo. Un potente reflejo en un espejo de mi antigua vida.

que duro es decir adiós, cuando solo piensas en quedarte.

te quiero; no lo olvides nunca.
Da igual lo mucho que llueva, o el calor que haga, tu imagen se grabó a fuego en mi mente. Y ahí es donde tiene que estar, siempre

nada permanece en calma

Te quise, te quiero, intentaré no quererte en el futuro.
Es complicado ¿sabes? mi vida ha girado en torno a ti mucho tiempo, yo solo podía ser consciente de tus gestos o tus pasos, de tus risas o suspiros. Eras el centro de todo.Es duro saber que todo eso no ha servido para nada, que mi fijación por ti ha pasado desapercibida, que fui una fan anónima.

+ Dime que me quieres
- Lo siento no puedo.
+¿Por qué?¿Qué ha cambiado?
-No ha cambiado nada, pero todo es distinto.
+Eso no tiene ningún sentido, y lo sabes.
- Si si lo tiene am... quizás prefieras que no te diga eso más.
+ Al contrario, deseo oír eso al despertarme, a la hora del desayuno, mientras leo, mientras canto, mientras respiro... mientras vivo.
- ¿pero no ves que esto no tiene ningún futuro, ninguna salida? Nos ahogamos los dos en un pequeño charco de agua, pequeña.
+Eso no es cierto, ¿es que hay otra verdad?
- No, y lo sabes
+No sé nada, solo soy consciente de que prefiero escuchar mil mentiras antes que oír que no me quieres.
-No puedo soportar más esto, sabes que te he querido como nadie podría hacerlo jamás, pero mi vida a tomado otro rumbo.
+Vete, entonces. No te necesito.
-Sabes bien que me necesitas. Tanto como yo a ti.
+ Entonces, ¿por qué demonios te vas?
-Por que es lo correcto, te lo he dicho cientos de veces, te mereces algo mejor.
+Supongo que esto es el fin.
-Lo es, y no sabes cuanto me duele.
+¿Tienes la poca decencia de decirme que te duele? Yo no te he pedido esto, nunca quise que te fueras.
-Tú sabes también que no es esto lo que yo deseo.
+ ¿Sería mucho pedir un último beso de despedida?
-No. Lo estaba esperando.
+Vale
-Vale.
+Adiós.
+Hasta siempre, princesa.

Jajajaja

Os voy una historia muy graciosa que me contaron el otro día:
Un chico va y le dice a una chica que está enamorado de ella, y la chica va... y se lo cree.
Amigas, que esto ya no existe.